El fraccionamiento de terrenos es el proceso de dividir un terreno grande en parcelas más pequeñas. Esto se hace con el objetivo de crear lotes individuales que puedan ser vendidos por separado o desarrollados para diversos fines, como la construcción de viviendas, comercios o proyectos industriales. El fraccionamiento puede implicar la subdivisión de un terreno en una serie de lotes más pequeños con calles, servicios públicos y zonas comunes planificadas. Este proceso generalmente está sujeto a regulaciones y permisos gubernamentales para garantizar que se cumplan los requisitos legales y urbanísticos.